Griselda Leal Rovira
No va a tardar mucho tiempo en que el tema de "Milei presidente" pase a ser una anécdota humorística, aunque lamentablemente trágica y bochornosa para los argentinos.
El concepto que ha manifestado Javier Milei en varias ocasiones es que redistribuir la riqueza es un “robo”, o sea que quienes tienen enormes fortunas se las merecen porque se las ganaron con esfuerzo y los que viven en la pobreza seguramente han de ser vagos o chorros, aunque también se contradice cuando ataca a la casta política que se ha enriquecido robando al pueblo, sus conceptos están un tanto entreverados.
Si bien este personaje lo dice abiertamente porque no tiene freno en su verborragia, es posible que no sea el único en pensar de esa manera.
La avaricia no parece ser un pecado que debe ser condenado para “la casta” a la que Milei critica, pero sin embargo es su aliada.
Aun en el caso de que sea corto el mandato de este gobierno, sin dudas va a dejar secuelas.
El verso de la pobreza para en un futuro estar mejor, es tan viejo como la propia humanidad, pero aunque parezca mentira el presidente argentino lo sigue aplicando y lo peor es que hay quien le cree.
Lo que ocurre no es solo el resultado de malos gobiernos anteriores, sino también es el foco de atención y experimento de un país rico, extenso y con poca población por parte de los grandes poderes que buscan dominar el planeta, y para eso deben empezar por América Latina a la que siguen considerando su “patio trasero”.
Si bien Milei aparenta ser un personaje rodeado por unos pocos desequilibrados como él, está claro que también está siendo usado con mucho cuidado por la ultraderecha liderada por Mauricio Macri, a quien se le ve al acecho como un ave de rapiña, esperando el momento adecuado para dar el zarpazo, y para eso cuenta con la vicepresidenta Victoria Villarruel, hija de un militar que se califica como héroe de las Malvinas, pero ella es la representante de la casta militar, muy allegada a los genocidas encarcelados por delitos de lesa humanidad, a los que visitaba en la cárcel y hacía favores.
Por otra parte el imperialismo yankee es aliado y complementado por una combinación de poderes y países satélites, incluida Europa.
Grandes fortunas de familias tradicionales como los Rothschild, Rockefeller, Morgan, Soros, etc. a las que se suman los nuevos billonarios como Musk, Bezos, Gates, Slim y otros, de una manera u otra forman parte del mismo accionar.
Con matices, todos tienen la misma meta, acumular poder, bienes y dinero sin evaluar las consecuencias negativas, ambientales o sociales.
Si en un lugar se acumulan enormes fortunas es porque faltan en otro lado, si unos pocos se enriquecen de manera desmesurada, son muchísimos los que carecen de lo indispensable.
Y como dijo el químico francés Antoine Lavoisier... “nada se crea, nada se destruye, todo se transforma”.
También está la rosca Evangelista, aparentemente aliada del Sionismo, acumulando armamentos para seguir adelante con el genocidio contra el pueblo palestino, y pese a que cada vez el gobierno de Israel está más desacreditado en todo el mundo, no deja de lado su propósito de terminar con la monstruosa tarea que supuestamente le encomendó DIOS, o sea, tomar las riendas del gobierno mundial ya que son “los elegidos por ser superiores” y eliminar sin piedad a quienes se opongan aunque se trate de niños inocentes, porque en un futuro pueden ser asesinos que se les vuelvan en contra.
Este conflicto no presagia nada bueno, dado que cada vez cosecha más enemigos que lo rodean y que también cuentan con importantes armamentos de guerra.
Mientras el gobierno de Estados Unidos se ha dedicado a hacer guerras con el respaldo del ahorro de su pueblo que en buena medida se está empobreciendo, China se ha dedicado a ser la fábrica del mundo exportando artículos a través de la ruta de la seda y acumulando bienes que han ido sacando de la pobreza a la mitad de sus 1.400 millones de habitantes.
Pero la realidad es mucho más compleja, porque aunque nos estemos moviendo en un mundo globalizado por obra y gracia de la tecnología y la aeronáutica, aún es extenso y existen grandes potencias que no siempre están de acuerdo con esas reglas de juego, China, Rusia, India, Irán, los países de Medio Oriente y sus aliados no aceptan la unipolaridad, además de tener también entre ellos importantes conflictos, guerras y enfrentamientos de índole económica o religiosa.
Los indicios de un cambio en la conformación de poderes se está dando aceleradamente, la creación de un gobierno mundial que en un momento fue el sueño de algunos poderosos se está viendo frustrado y nos encaminamos a una multipolaridad indefectiblemente.
La creación del BRICS, grupo al que el presidente Milei rechazó por seguir fiel a sus aliados, toma fuerza ampliando su campo de acción.
Por un lado vemos con preocupación un avance de la derecha en muchos países, en particular del primer mundo, pero por otro lado notamos una toma de conciencia y preocupación por parte de grandes multitudes que salen a la calle a manifestar en contra de lo que consideran injusto.
El concepto de democracia está bastante arraigado en la mayoría de los países del planeta pero falta un gran camino por recorrer antes de dejar de ser una plutocracia, antes de que las mentes de los votantes actúen con criterio propio y no se dejen manejar por los grandes medios de comunicación que buscan manipularlos en su beneficio, antes de que a los políticos no les sea posible cometer actos de corrupción porque el pueblo no se los permita, antes de que las castas y las realezas no tengan espacio para apoderarse de cargos y fortunas que no les pertenecen, antes que militares y policías entiendan que forman parte del pueblo que es quien los mantiene.
No hay duda que este es un período en la historia de la humanidad que está marcando un antes y un después, el panorama es incierto y lo que ocurra en pocos años será decisivo en cuanto a la supervivencia humana.