CUIDADO DE LA VIDA Y LA NATURALEZA EN UNA ECONOMÍA CAPITALISTA

Hersilia Fonseca integrante del equipo de edición de Claridad ha realizado un trabajo de edición de la exposición realizada por Yaro Herrero, el pasado 6 de octubre en Montevideo, organizada por la Fundación Siembra.

El trascendente y esclarecedor  punto de vista de esta  antropóloga, ingeniera agrícola, educadora social y ecofeminista, llegara a nuestros lectores en tres entregas.

(1a parte) [1]Yayo Herrero2“  El gran reto es generar diferentes formas comunitarias en unas culturas absolutamente individuales”.

 

En el encuentro organizado por Siembra -a quien agradecemos el uso del material- con el apoyo del Municipio B, el pasado 6 de octubre, Yayo Herrero se extiende sobre diversos temas, con una visión eco feminista en un mundo capitalista. Ofrecemos la primera parte -tres en total- de su presentación.

 

 

 

 

Queremos frenar y transformar el momento en que estamos; al mismo tiempo hay un problema de velocidad en el mundo activista y en la política,  que hace que vayamos por las mismas dinámicas y los mismos caminos establecidos desde hace tiempo, por lo cual estos espacios de frenar y repensar son importantes.

Estamos viviendo un momento de guerra contra la vida (GCV); la política, la economía y cultura hegemónica se desarrollan de espaldas y en contraposición con las bases materiales que permiten mantener la vida. Ni el feminismo, ni el ecologismo ni la ecología política son parte de lo que lleva cualquier persona de izquierdas en la mochila, sino que son componentes estructurales y sin ellos es imposible realizar un análisis material completo de la vida en general y del momento que estamos viviendo. Por lo tanto, cualquier izquierda que no incorpore desde abajo y como reflexión, lo que vamos a compartir es una izquierda que flota por sobre la materialidad pero que no puede comprender bien el momento que estamos viviendo.

En ese marco de guerra contra la vida ¿qué sostiene la vida humana? Habría dos dependencias materiales:

  1. Los seres humanos somos animales que se insertan en una trama de la vida también integrada por animales, plantas, aire, agua, tierra, un organismo que se auto organiza, que se desenvuelve y que tiene límites.

Nuestro planeta tiene límites físicos tanto en lo que llamamos no renovables (minerales de la corteza terrestre) como en los renovables (el agua no se renueva a la velocidad que le gustaría al metabolismo agro-urbano-industrial, sino a la velocidad del ciclo del agua) y también hay límites en lo que llamamos sumideros del planeta que son los procesos biofísicos que permiten que se degraden los residuos que genera la actividad humana y no humana. Sobre una superficie física que tiene límites físicos nada se puede plantear, crecer, de forma ilimitada.

Esto es importante tenerlo en cuenta porque el modelo económico capitalista se ha desarrollado precisamente basado en un crecimiento económico que se acompasa, va directamente acoplado a un uso cada vez mayor de recursos y a una enorme generación de residuos. Pero no es solo el sistema capitalista, los modelos industriales del llamado socialismo real, aunque repartido de otra forma, crearon modelos de crecimiento en la producción, en la fabricación de objetos, de materiales que se basaban en la misma lógica, es decir que el capitalismo de estado desarrolló la producción creciente, que se da por ej. actualmente en China. Tradicionalmente ha habido una parte de las izquierdas más productivistas que han descansado, con otra forma distinta de distribución del excedente de riqueza, pero sobre el mismo sueño de poder crecer ilimitadamente sobre algo que tiene límites físicos.

El Capitalismo en un sistema en rebeldía contra los límites, le declara la guerra a los límites y al declararle la guerra a los límites lo que ha hecho es haber provocado una situación de agotamiento de una buena parte de los recursos de la tierra, además de haber forzado la innovación de los sistemas naturales, el cambio climático, que no es más que el cambio de las reglas de juego que realiza todo lo vivo, provocada por una dinámica acelerada de quema de combustibles fósiles, entre otros instrumentos.

Esta primera dependencia tiene que ver con la Tierra, la podríamos llamar ECODEPENDENCIA.

  1. La vida humana transcurre inserta en cuerpos, finitos, vulnerables. Vulnerables quiere decir que tienen necesidades de alimentación, agua, energía, cuidados, relaciones, viviendas. Si no son cubiertas, la vida no se sostiene o se sostiene precariamente. El tema de que los cuerpos estén siempre necesitados, en una necesidad cíclica, que tiene que ser sostenida todos los días, obliga a pensar en la vida en común de un modo distinto de como se ha venido pensando.           

 

Yo le debo al marxismo una profundidad analítica que reivindico. Pero recuerdo la  frase del Marx primero, que decía que la emancipación, el progreso, suponía pasar del reino de la necesidad al reino de la libertad. Esto suponía que en algún momento se podrían cubrir todas las necesidades y ahí comenzaría la libertad. Pero como las necesidades nunca terminan de satisfacerse, el reto es cómo generar libertad a la vez que se atienden las necesidades.

En la historia las que se han ocupado principalmente de las necesidades de los cuerpos han sido las mujeres, no porque estemos mejor dotadas genéticamente para hacerlo, sino porque vivimos en sociedades que tienen una división sexual del trabajo que asigna de forma obligada todas las tareas de mantenimiento de las necesidades de la vida a las mujeres. Procesos que vienen dados culturalmente, a partir de la educación y socialización donde las niñas pequeñas se van interiorizando en ese servicio familiar obligatorio que las acompañará toda su vida, y ante el cual hay que rebelarse. Una concepción del amor romántico ligado al sacrificio y a la renuncia, el estigma de la mala madre, la mala hija o la mala esposa y el miedo, lleva a esta situación. El feminismo ha desnudado la violencia machista que lleva a los feminicidios, que son la punta del iceberg de esta violencia.

Es decir, somos Ecodependientes, sujetos a los límites físicos de la Tierra, y somos Interdependientes es decir la vida de un ser humano en solitario es inviable, no hay ningún ser humano que pueda considerarse independiente o autónomo. El ser dependiente no es una patología sino un rasgo inherente de la vida, todos los seres humanos, sobre todo en algún momento del ciclo vital -como es la infancia o la vejez o por enfermedad- van a necesitar ayuda de otras personas.

En base a la Ecodependencia y la Interdependencia hay que decir que una vida nacida, por el hecho de haber nacido, no constituye en modo alguno una certeza para siempre, una vida nacida es una posibilidad y esa posibilidad se transforma en una vida cierta en la medida que transcurra inserta en una comunidad que garantiza que se van a poder cubrir las necesidades cotidianas generacionales que tenemos a lo largo del tiempo. Sin esa doble relación la vida o no se sostiene o es precaria.

A esto, desde el enfoque del eco feminismo, le llamamos Enfoque de la Sostenibilidad de la Vida, quiere decir que debemos construir sociedades que pongan la vida en el centro. Significa garantizar en forma clara la cobertura de las necesidades materiales y no materiales, que permitan sostener una vida digna y una vida decente.

La mirada del desarrollo, del progreso, no se ha sostenido desde el punto de vista de garantizar la Sostenibilidad de la Vida de todas las personas, sino que se ha sostenido sobre otros propósitos, por ej. en el capitalismo, la maximización de las tasas de ganancias del capital, que parece lo previo a que la vida se pueda sostener.

Como estamos en Guerra con la Vida, veremos algunos de los síntomas, de elementos que desde el punto de Sostenibilidad de la Vida es preciso resaltar:

  1. Guerra contra la Naturaleza (visto desde el punto de vista occidental donde el Hombre está como separado de la Naturaleza)

Los síntomas, por ejemplo: el Cambio Climático, que es una de las consecuencias de la vida construida principalmente en Occidente, de espalda a los límites físicos de la tierra. La quema acelerada de combustibles fósiles, unido a otros procesos que ha desencadenado el cambio climático, ha cambiado las condiciones bio físicas en que se desarrolla la vida. Como el hombre ha evolucionado, junto con toda la naturaleza, está adaptada a estas condiciones bio físicas. Por lo tanto no debemos decir salvemos el clima o el planeta, lo cual no es necesario ya que vienen evolucionando de hace más de 3800 millones de año, lo que está en riesgo en este momento es la supervivencia de la humanidad en la trama de la vida y de otras muchas especies que nos acompañan, pero el conjunto de la vida sobrevivirá sin seres humanos, el tema está en cómo podemos hacer para que la vida humana se desarrolle adecuadamente en este planeta.

El último informe del Panel intergubernamental de cambio climático, se hizo público este año en febrero, muchos de los técnicos participantes filtraron a la prensa sus conclusiones, aproximadamente en octubre. Los filtraron porque no tenían la seguridad que dicho informe una vez que pasara por el filtro de la política y de las empresas que operan para sacar la información adelante, eliminaran alguna parte de la crudeza de los datos.

El informe viene a plantear que ya en este momento de no hacer nada, que no es simplemente mitigar, sino adaptar condiciones de  protección para las personas, en este momento está en riesgo la vida de 3000 millones de personas, somos 7600 millones, se ha venido negando el cambio climático, su incidencia, su gravedad. Han sido decenios de negacionismo, ahora el negacionismo es más criticable, hay especímenes que se atreven a decirlo de forma explícita pero de forma implícita hay muchas personas en al ámbito académico y también en ámbitos políticos, dentro de la izquierda, han hecho un negacionismo por omisión cuando se le ha restado valor a los informes que venían saliendo. 

  1. Crisis de energía y material

En estos momentos el tema está mucho en los medios de comunicación por la guerra en Ucrania, pero existe desde mucho antes, a pesar de que lo de Ucrania lo acelera e introduce dimensiones de cuellos de botella.

En el año 2006 la Agencia Internacional de la Energía, publicó que se había alcanzado el pico del Petróleo Convencional. Es ese momento en el que por cada barril de petróleo que se extrae en cualquier lugar del mundo no se encuentran reservas que lo puedan sustituir. Y llamamos Petróleo Convencional al petróleo de alta tasa de retorno, es decir, el petróleo que cuesta poco, en términos energéticos, ser extraído. Tengamos en cuenta que para traer petróleo del subsuelo hay que gastar petróleo, mover una máquina que hace el pozo, se saca, se refina. El petróleo que se extraía hasta los años 70 u 80 era de altísima tasa de retorno, se invertía un barril de petróleo y se podían obtener de 100 a 120 barriles. El petróleo que se está extrayendo en este momento, tiene tasas de retorno que oscilan entre 3 y 10, porque el petróleo de buena calidad, fácil de extraer fue el primero en sacarse; ahora se extrae de suelos submarinos lo cual es más difícil, viene menos puro, hay que gastar mucha más energía para poderlo extraer. El pico del petróleo y las dificultades mayores para extraerlo, harán que sea prácticamente inaccesible.

Ese agotamiento del petróleo tiene una importancia absolutamente crucial en una economía globalizada, que podríamos decir, que come petróleo, economía petrodependiente y energívora. Pensemos en la producción de alimentos, se siembra y se cosecha con máquinas enormes, fertilizantes de origen químico de síntesis, que requieren enormes cantidades de petróleo, productos fitosanitarios que hay que fabricar usando petróleo y luego un enorme trasiego de los materiales, las materias primas, incluso ya procesadas a diferentes lugares del mundo (generalmente en los supermercados consumimos productos que vienen de muy lejos).

El 65% de la población del planeta come alimentos que se producen cerca de donde son consumidos. Es el 65% más empobrecido del planeta.

Los lugares enriquecidos y peor cuanto más grandes, son absolutamente dependientes de alimentos que son producidos enormemente lejos. Y la propia ciudad necesita cantidades de petróleo. Por ej., Madrid no produce nada cerca de lo que consume, todo debe ser traído y a su vez todos los residuos que produce deben ser retirados por camiones, pensemos en Tokio, Bs.As., Londres, son ciudades que no son viables si ese metabolismo no es sostenido sobre energía fósil. Digo energía fósil porque en este momento el 90% del transporte consume combustible, fundamentalmente el diesel, que es una fracción del petróleo de mayor calidad. O sea hay un pico de diesel brutal que no se va a resolver porque no hay forma de aumentar exponencialmente la producción de diesel a partir de un petróleo que declina.

1   Encuentro con Yayo Herero. Municipio B, Grupo Siembra, Youtube.

2 Nacida en Madrid en 1965. Antropóloga, ingeniera agrícola, educadora social y una de las principales voces del eco feminismo. Actualmente es profesora de educación ambiental y desarrollo sostenible de la Cátedra UNESCO de la UNED. Su trayectoria investigadora se ha centrado en la crítica al modelo de desarrollo y producción capitalista como una amenaza para el planeta y la vida, en:

https://www.cccb.org/es/participantes/ficha/yayo-herrero/232916