El Frente Amplio sus compromisos y la suerte de nuestro proyecto de país

  Por: Carlos Coitiño. Activista y militante de luchas sociales y políticas. Legislador. Integrante del PVP (Partido Por la Victoria del Pueblo)

El Frente Amplio como proyecto transformador de la sociedad uruguaya está viviendo interpelaciones y cuestionamientos desde distintos sectores de la sociedad que debemos ser capaces de asumir y dar respuesta. Tenemos que preguntarnos por qué miles de frenteamplistas se han desmovilizado y cientos de miles de votantes han dejado de expresar su apoyo. Sostenemos que esto se debe entre otros, a dos principales factores; la insuficiencia de las políticas públicas y del cumplimiento de nuestros objetivos programados, ya nuestra dispersión ideológica para dar la batalla por la opinión pública. Por ello sin avances y rectificaciones en las políticas públicas y en la cohesión política, no habrá fortalecimiento y cambio en la calidad de la relación con la base social.

Nos quedan más de dos años para avanzar en nuestro proyecto, debemos escuchar estas demandas, ser autocríticos, afirmar y profundizar las conquistas, corregir errores y avanzar en los cambios aún pendientes de realización, todavía nos queda plan de gobierno por cumplir.

El retroceso y derrota de otros proyectos progresistas y de izquierda de la región, así como el contexto internacional de contracción económica plantean desafíos sobre cuál debe ser el rumbo a tomar, emergen en el FA diversas perspectivas, lo que nos obliga a profundizar el debate para afirmar el camino de transformación desde una perspectiva de izquierda.

Convocamos a los frenteamplistas a sumarse para fortalecer la acción del FA como fuerza política de cambio, y recuperar y reforzar su vínculo con los movimientos sociales. Abrir un debate necesario sobre las cosas pendientes, las prioridades para 2018 y 2019, los objetivos y los recursos para realizarlos. Así como trabajar en la elaboración de un proyecto de país 2020-2024 a la altura de las demandas y necesidades de la gente.

 

Podemos vencer en un contexto adverso

Nosotros podemos resistir y vencer el marco adverso internacional y regional y mantener la supremacía del proyecto frenteamplista en Uruguay.

Las derechas en todas sus gradaciones ya sean conservadores, reaccionarios o clasistas, ya sean legalistas o golpistas; nunca tuvieron en los últimos cincuenta años ni lo tienen ahora, un proyecto de desarrollo con justicia social para nuestros países.

Cada vez que han controlado el poder lo han puesto bajo la tutela de las potencias hegemónicas, han desintegrado nuestras naciones y al interior de nuestras sociedades han instalado la fragmentación, la exclusión social, la pérdida de derechos, la persecución antisindical y el empobrecimiento en las más extensas capas de la sociedad.

Esa es su naturaleza, su identidad, su clase, su rol dentro del sistema económico de acumulación. Y ahora que han conquistado nuevos gobiernos vuelven a demostrar lo mismo. En nuestro país tampoco pueden mostrar otra cosa y no tienen todavía en sus manos las cartas de triunfo.

Avanzar en las transformaciones estructurales y fortalecer y ampliar el bloque político de los cambios 

Pero cuidado, nosotros podemos tener en nuestras manos las cartas de nuestra propia derrota. Así lo reconoce explícitamente el plenario nacional en el documento “Estrategia política del Frente Amplio hacia 2020” aprobado en julio pasado.

En el Cap.V “Objetivos y Lineamientos Estratégicos”, el plenario nacional ha dicho con acierto (p. 7):

“Hemos tenido una gran dificultad colectiva para construir un relato y una práctica política que vertebren la difusión de los cambios que la izquierda ha logrado producir en estos años y la implementación de las transformaciones aún pendientes, así como la necesaria construcción de nuevos objetivos de transformación, nuevas causas por las que luchar y organizarse colectivamente. Ello puede comprometer la continuidad del proceso de cambios iniciados en 2005.”

“No obstante tenemos las posibilidades y el tiempo para revertir esta situación, para lo cual nos proponemos los siguientes objetivos, que servirán de orientación política y deberán concretarse en el plan político.”:

  • Avanzar en las transformaciones estructurales definidas en el programa del Frente Amplio y que se expresan en las políticas públicas que nuestro gobierno lleva adelante.
  • Fortalecer y ampliar el bloque social y político de los cambios.

Y como corolario lógico agrega como objetivo final de la etapa, conquistar el cuarto gobierno nacional y nuevos gobiernos departamentales y municipales. Y agrega más abajo: “Para reorganizar la esperanza, es necesario tener lineamientos programáticos que le den sentido de futuro a la lucha política.”*