Sectas cristiano-sionistas

 

Griselda Leal Rovira

Sionismo Cristiano es un movimiento dentro del fundamentalismo Cristiano Evangélico que ve en el estado de Israel el cumplimiento de las profecías bíblicas y por tanto ha de ser ayudado política, financiera y religiosamente.

Es un tipo de ideología cristiana procedente del pensamiento apocalíptico judío que sostiene que el Mesías regresará para establecer su reinado, que durará 1.000 años.

¿Cuál es la consecuencia de este pensamiento en la mente de los seguidores?

Evidentemente sugiere que no vale la pena luchar ni movilizarse para obtener conquistas sociales porque los problemas se solucionarán a corto plazo con la llegada del enviado de Dios quien vendrá a impartir justicia entre la humanidad.

En una palabra, despolitizar, anestesiando a las personas para poder manipularlas mejor.

No todos los judíos son sionistas ni todos los sionistas son judíos.

La religión es una herramienta que oculta el verdadero propósito que es político y de dominación.

En el año 1902 apareció en la Rusia zarista un extenso documento llamado “Protocolos de los Sabios de Sión”, el cual rápidamente fue calificado como falso por parte de los mismos involucrados, si bien no hay pruebas tangibles de que sean verdaderos, tampoco puede decirse que sean falsos, sobre todo teniendo en cuenta que parecería que fueran una profecía, ya que muchos de esos puntos se cumplen al pie de la letra. En él se detalla la manera en que este grupo de hombres pretenden ir manipulando a la población mundial a fin de culminar en un gobierno global similar a una dictadura.

Dando una lectura con una visión actual, podemos ver que muchas de sus premisas se asemejan mucho a lo que está ocurriendo hoy en día, por ejemplo, acumulación de capital en pocas manos, manejo de medios de comunicación, de armamento, de la energía, del comercio, de la enseñanza, de la salud, la cual es manipulada a través de los laboratorios con la complicidad de la Organización Mundial de la Salud, etc.

Coincide que en la misma fecha, 1902, sale a la luz el SIONISMO, un movimiento de características religioso-políticas, creado por el periodista austríaco Theodor Herzl, que tiene como meta crear un estado judío independiente y soberano en la tierra de Israel.

45 años más tarde la Organización de Naciones Unidas (ONU) apoyó este plan, decretando la división de Palestina entre Israel y la población local de habla árabe.

No obstante, poco después se produjo de guerra de la Independencia contra Egipto, Jordania, Siria Líbano e Irak, que duró 15 meses costando la vida a unos 6.000 israelíes.

Este Nuevo Orden tiene muchas patas, una de ellas es a través de las religiones evangelistas que se vienen difundiendo por toda América Latina partiendo de los Estados Unidos y conectadas con la doctrina sionista, sus principales reclutas son pastores y predicadores.

En agosto de 1985 se llevó a cabo el primer congreso mundial de Cristianos Sionistas en Basilea, Suiza, con la presencia de personalidades de la política, el espectáculo y la cultura.

Actualmente  en Estados Unidos cuentan con más de 1.000 emisoras de radio y 100 cadenas de televisión,  llegando a 50 millones de personas que aportan económicamente y  son las mejores aliadas que tiene Israel.

Los planes del SIONISMO se han venido acelerando en los últimos años y la culminación hasta el momento es el genocidio que se está llevando a cabo en Palestina.

El gobierno de Israel dice que tiene derecho a defenderse, pero la realidad es que la violencia trae violencia, esos “terroristas” de Hamás que realizaron el atentado del 7 de octubre de 2023, por más que no se justifique, se explica como el resultado de más de 70 años de acoso, discriminación, robo de tierras y ganado, encarcelamiento incluso de niños, y asesinatos por parte de israelíes contra sus vecinos.

Esos terroristas de hoy, fueron niños y adolescentes que juntaron odio toda su vida ante tanta barbarie y sólo piensan en justicia y posiblemente venganza.

Está claro que la meta de Netanyahu y su séquito de seguidores es terminar con lo que empezaron, es decir, acabar con la población de la Franja de Gaza, de Rafah y de cuanto palestino esté en la zona y les moleste su presencia, se apoyan en “SU” libro sagrado, que de acuerdo al mandato de “SU” Dios, les está permitido asesinar hombres, mujeres y niños sin ninguna contemplación.

Pero ¿qué pasa con el resto de la población dentro de Israel? Sabemos que ha habido importantes manifestaciones contra el primer ministro y reclamando la liberación de los rehenes.

¿Hay miedo a la represalia? ¿Hay conciencia del genocidio que se está llevando a cabo a pocos kilómetros de sus domicilios?

En Argentina, el presidente Milei es un ferviente admirador del SIONISMO, incluida la fe religiosa judía, al punto de haber realizado un viaje a Israel apenas asumió su mandato.

¿Es Milei parte de este plan siniestro de apoderarse del planeta por parte de las grandes corporaciones e instaurar un gobierno mundial capitalista en el que las grandes masas seamos esclavos?

¿Es Argentina la zona elegida como punta de lanza para esta parte del planeta?

¿Este patético personaje ha sido formado para cumplir el papel o ha sido modelado en base a sus características personales de individuo desequilibrado?

¿Ha sido captado por una especie de secta?

Lo increíble es que logró su propósito y convenció a más de la mitad del electorado muchos de los cuales aún lo siguen.

Somos millones los que estamos en contra del genocidio en Palestina, por más que mientan o repriman es difícil ocultar los horrores que se cometen y la sensibilidad se está apoderando de la gente, las movilizaciones y la conciencia por parte de muchos gobiernos va haciendo fuerza para que la pesadilla termine.

De todos modos la lucha no va a cesar a corto plazo en esa parte del planeta.

El mundo está enfermo y el futuro es incierto.